(María
Santísima): “Mis amados hijos, hoy, cuando aún
están conmemorando aquí la fiesta de Mi Medalla de la Paz, revelada por Mí, a Mi
hijito Marcos en el día 08 de Noviembre de 1993 y también las grandes señales
que les di el 07 de Noviembre de 1994.
Vengo nuevamente del
Cielo para decirles: “Yo Soy la Reina y Mensajera de la Paz. Soy la Mensajera
de la Paz y fui enviada por el Señor para traerles la Paz del corazón, la Paz a
sus familias y la Paz para el mundo entero.
Soy la Mensajera de la
Paz y como tal, de Mi Boca salen apenas palabras que producen Paz, palabras de
verdad, palabras de conversión, palabras de amor, palabras de bendición.
Bienaventurada el alma
que acoja con amor todos Mis Mensajes y las obedece, porque sobre estas almas
va caer la Paz del Altísimo y ellas no serán atingidas ni por la violencia, ni
tampoco también por los rayos de la Ira de DIOS que quiere castigar los pecados
de este mundo.
Soy la Mensajera de la
Paz y traigo del Señor para ustedes el Mensaje que les muestra el camino seguro
para alcanzar la Paz que tanto desean, la Paz de sus familias y la Paz del
mundo. El camino de la Oración, de la Penitencia, de la Renuncia al pecado que
es el causador de todos los males, desórdenes y guerras del mundo. Y siempre
más les conduzco por del camino del bien, de la armonía, de la concordia y de
la completa amistad entre ustedes y DIOS, y entre todos los hombres. Les llevo
así cada vez más a construir la Paz, en cierto sentido, porque la Paz cada día
se construye con la Oración, con el Sacrificio, con la Renuncia al pecado y con
la completa fidelidad al Señor.
Soy la Mensajera de la
Paz y por lo tanto, vengo del Cielo para decirles: Que la Paz está en Peligro,
la Paz del mundo está amenazada por Satanás. No pueden imaginar las horribles
guerras que Satanás planea contra ustedes. No pueden imaginar cuantos crímenes
violentos se cometen todos los días en el mundo, porque los hombres no rezan y
por eso, no tienen el Amor de DIOS en el Corazón. Deben por lo tanto, rezar por
la Paz, deben conservar la Paz con la Oración del Rosario y deben ayudar a
todos a rezaren el Rosario para también protegeren su Paz y la Paz de sus
familias y cada vez más aumentar en el mundo la Paz del Cielo entre los hombres.
Soy la Mensajera de la
Paz y por lo tanto, les muestro en Mis Mensajes el camino seguro para vencer toda
guerra, para vencer todo el odio, violencia y discordia: El camino de la Oración.
El Rosario es el secreto de la Paz, el Rosario es la fuente y el conservador de
la Paz, donde fuera rezado con amor todos los días bajará la Paz del Señor y Mi
Paz. La Paz allí será conservada y así, Satanás no podrá destruir la Paz de
ustedes.
Yo les amo mucho y les
di mi Medalla de la Paz para por medio de ello protegerles de todos los ataques
de satanás, defender la Paz, proteger la Paz, conservar la Paz, aumentar la Paz
de ustedes.
Usen Mi Medalla con amor y confianza y Yo les prometo
hijitos, que muy pronto la Paz vendrá para la tierra, DIOS enviara al Ángel de la Paz a dar la Paz
al mundo si ustedes Rezaren Mi Rosario todos los días, si rezan Mi Rosario con
amor y confianza, si renunciaren siempre más al pecado.
Sí, hagan con que todos
Mis hijos entren en Mis grupos de Oración para rezar Mi Rosario, la Trecena, la
Setena, Hora de la Paz y todas las Oraciones que les di. Para que así cada vez más
la Paz del Cielo aplaste el odio satánico de Satanás que ahora predomina sobre
toda la tierra y también domina todos los corazones.
Formen grupos de Oración,
hagan cenáculos, para que así Mi Paz, la Paz de María aumente y se difunda en
los hogares, en los corazones. De modo que juntos derrotemos todos los planes
de Satanás, que quiere destruir no apenas a ustedes, la raza humana, sino
también el mundo en que viven por medio de la guerra, por medio de la
destrucción atómica. Yo deseo Mis hijos que la Oración de ustedes todos los
días sea siempre más por la Paz y para aumentar y hacer triunfar la Paz.
Les pido: ¡Conviértanse
sin demora! No quiero que sufran en el futuro. Por eso Mis hijos les digo: ¡Conviértanse!
¡Cambien de Vida! Hagan lo que les pido. Yo les confirmé con Señales tan
estupendas tantas veces aquí. Mis Mensajes los doy con el Corazón afligido
porque veo que cada día más ustedes se alejan de Mí y de Mi hijo Jesús. Y si así continuaren muy pronto el Castigo les
sorprenderá y será demasiado tarde para ustedes.
Por eso les pido: ¡Conviértanse,
cambien de Vida, vuelvan a DIOS!
A todos Bendigo con
Amor y especialmente a Mi hijito Marcos, que durante todos esos años perseveró
en Mi servicio y en la fidelidad a Mi Corazón Inmaculado, correspondiendo lo más
que puede a Mi Voluntad y a Mis Planes de Amor trabajando intensamente para
tornar Mi Corazón Inmaculado conocido y amados de todos y al mismo tiempo para
tornarme Reina de todos los Corazones. En la persona y en el trabajo de él manifiesto siempre más Mi
fuertísima Luz que se intensificará más y más hasta destruir todas las
tinieblas de Satanás en el mundo.
Sobre él, Mi hijo
predilecto y sobre todos ustedes desciendo ahora Mi Bendición Materna: de FÁTIMA…
de LOURDES… y de JACAREÍ.
(Marcos):“No, no te conozco Señora
¿Quién eres Tú? Sí…sí…”
(Santa
Priscila): “Amados Hermanos Míos, Yo, Priscila,
Sierva del Señor y de la Madre de DIOS, Me alegro por venir hoy con Ella para bendecir
y darles la Paz.
Hace mucho tiempo deseaba
venir aquí y hoy determinó el Altísimo que Yo viniese para decirles: busquen el
Amor, mientras Él se deja encontrar. El Amor es DIOS, el Amor es Jesús, Jesús
es Amor.
Busquen a Jesús, busquen
a DIOS mientras Él se deja encontrar por ustedes aquí, para que el alma de
ustedes, de un desierto de pecado, de maldad y de impureza se transforme en un Jardín
Verdoso, perfumado de virtudes, gracias y amor.
Busquen al amor
mientras Él se deja encontrar por ustedes aquí, búsquenlo con el Corazón
abierto, humilde, sincero, sin prepotencia, sin soberbia, sin dureza. Porque a
esos DIOS resiste, DIOS resiste a los soberbios y da sus Gracias sólo a los
humildes, o sea, sólo a aquellos que realmente reconocen que sin DIOS nada son,
nada pueden, y que sólo en DIOS está el verdadero y el perfecto Amor.
Busquen el Amor
mientras Él se deja encontrar aquí, abriendo de par en par las puertas de su corazón
para el Señor, dejándolo entrar con su Gracia y transformarles completamente en
una obra de maravillosa belleza para Su mayor Gloria, Su mayor Triunfo y Exaltación.
El Señor está tan cerca de ustedes aquí, cuantos los buscan por todos los lados
y desprecian Su presencia aquí. Si
vinieran aquí con el Corazón humilde, contrito y humillado, el Señor se dejaría
encontrar por Ellos. La Madre de DIOS se dejaría encontrar por ellos y ellos
tendrían un encuentro verdadero con DIOS
y con la Madre de DIOS. Pero su soberbia los aleja, su prepotencia, su
dureza de corazón los aleja y por eso cuanto más buscan al Señor por otros
lados, menos lo encuentran y se alejan más de Él. Porque no quieren la verdad,
no quieren encontrar al Señor aquí en la simplicidad de este lugar.
Bienaventuradas las
almas que buscan al Señor aquí y que abren su corazón para Él, viendo su
presencia aquí más allá de las circunstancias. Porque verdaderamente aquí encontrarán al Señor y recibirán de Él y
de Su Madre, Gracia sobre Gracia, Bendición sobre Bendición. De modo que
gritarán extasiados: YA NO SOY YO QUIEN VIVO, SINO ES DIOS QUIEN VIVE EN MÍ.
Busquen, busquen al Señor.
Búsquenlo mientras Él se deja encontrar por ustedes, porque muy pronto el Señor
se retirará de ustedes. Se ocultará por un tiempo como se ocultó de sus Apóstoles,
3 días después de Su Pasión en el seno de la tierra. El Señor se ocultará para
probar la perseverancia de los justos y al mismo tiempo para dar a aquellos que
no lo buscaron, el castigo debido de su abandono.
Por eso, busquen al Señor
mientras todavía es tiempo, porque ahora es tiempo de Gracia, de Bendición y de
Misericordia. Sí, ese tiempo de Misericordia terminará y la Madre de DIOS no
les dará más Mensajes. Entonces, felices de aquellos que fortalecieron y
alimentaron su corazón con la Palabra de Ella durante esos años y desgraciados de
aquellos que despreciaron las palabras de Ella, porque sentirán hambre y no
tendrán pan cara comer. O sea, su alma estará sumergida en tinieblas profundas
y no tendrán más los Mensajes y Consejos de la Madre de DIOS para arrancarlos
de sus tinieblas, se debilitarán de hambre e inanición espiritual.
Mientras que aquellos
que buscaron a la Madre de DIOS y con Ella perseveraron todos esos años estarán
con sus almas saciadas de la Gracia de DIOS, de los Dones del Espíritu Santo,
del Amor del Señor, de la Sabiduría Celeste, de las Bendiciones Divinas.
Si no quisieran ser Mis
Hermanos del número de los infelices que irán a morir de hambre espiritual
busquen ahora al Señor y a Su Madre, mientras Ellos aquí les dan pan y pan en
abundancia.
Cierren sus oídos, o sea
los sentidos de sus almas para las
tentaciones del demonio. Refútenlas con la Palabra de DIOS, con los Mensajes de
la Madre de DIOS, meditándolos con la Oración, con la Meditación de todos de lo
que la Madre les dio aquí. Porque las obras de la Madre de DIOS aquí son
admirables para aquellos que en ellas meditan y aquellos que meditan en las
Palabras que la Madre de DIOS dio aquí y en Sus Obras, tiene la fuerza y la sabiduría
para repeler toda la tentación de Satanás, por mayor que sea.
Perseveren en la Oración,
perseveren en la Gracia de DIOS, perseveren en el Santo Rosario ¡Oh, si yo hubiera
tenido el Santo Rosario en los tiempos que viví en Roma en los primeros siglos de
la era Cristiana! ¡Oh como hubiera rezado, como lo habría amado! Ustedes viven
en este tiempo bendito en que tienen el Santo Rosario, Ámenlo, récenlo, porque
es un medio seguro y eficaz de Salvación. Aquellos que lo rezaren el Señor
decretó no negar nada nunca, porque es la Oración de Su propia Madre Bendita.
Caminen siempre más en
el camino del Sacrificio y de la Penitencia. Vuelvan a hacer ayuno por lo menos
en los viernes, incluso los que trabajan, todos deben ayunar, porque todos
tienen un alma que en cualquier momento puede perder el tesoro precioso de la
Madre de DIOS, del Amor de María Santísima y de todas las Gracias que ya
recibió. Por eso guarden su tesoro con el ayuno para que Satanás no use la
carne de ustedes para hacer al alma de ustedes perder todos los tesoros del
Cielo que recibieron.
El Amor de DIOS es un
tesoro maravilloso, cuando el Alma lo tiene, ella vive más como un Ángel de que
como hombre. Vive inmersa en la Paz, en el Amor de DIOS, en la alegría, vive
inmersa en la amistad divina, en la propia transcendencia recibiendo luz sobre
luz del Señor. Pero es un tesoro fácil de perderse, basta un pecado, basta un
apego, basta una pasión no combatida, no refrenada y listo, el alma pierde todo
lo que ganó, todo.
No corran este riesgo,
no pierdan su tesoro, vigílenlo, guárdenlo en un cofre fuerte que nadie jamás
podrá romper, este cofre es el Corazón Inmaculado de María, guarden su tesoro
en el cofre de Ella por medio del Rosario, por medio del ayuno, de la
meditación de los Mensajes de Ella, de la huida del pecado y sobre todo, por la
perfecta esclavitud de Amor a esta Madre Santísima.
Sean siempre “Sí” a
Ella, siempre “Sí” a la Voluntad de Ella y si lo hicieren, estará seguro su
tesoro en el Cielo, en el Corazón de la Virgen María. Y cuando partieran de
este mundo, este tesoro se transformará en una Vestimenta riquísima de Gloria Eterna con la cual serán revestidos y colocados en
el medio de los Ángeles para cantar las alabanzas del Señor y de la Madre de
DIOS por toda la Eternidad.
Recen, la Oración es
condición de salvación, la Oración es el secreto de la Salvación.
A todos, Yo ahora, les
Bendigo: de ROMA… de LOURDES… y de JACAREÍ.”
(Marcos):
“Sí…sí…sí,
yo lo haré. No, no quedarás más olvidada. Hasta pronto…”