La Señal de la Cruz al inicio y al final de la novena.
PRIMER DÍA
LA PRIMERA APARICIÓN DE NUESTRA SEÑORA
Contemplemos a la Virgen Santísima apareciendo por primera vez al joven Marcos Tadeu en Jacareí, en el día 7 de febrero de 1991, pidiéndole que buscase la Santidad.
“- Yo estaba arrodillado terminando el Padre Nuestro, el Ave María y el Gloria, que era lo único que yo sabía rezar. De pronto, fui a terminar la oración con la Señal de la Cruz, y mi brazo fue detenido. Miré hacia adelante, un viento comenzó a soplar, una brisa agitó mi ropa, y luego vi, por encima del Altar, una Luz en forma de globo que se encendía, más brillante que el Sol. Sentí mi alma arrebatada del mundo, mi cuerpo no respondía a mi voluntad, yo no conseguía moverme, ni hablar, ni levantarme o correr. No veía quién me hablaba, pero veía la Luz que tomaba todo el Altar. Oí una voz tan clara como un sonido de campana, una voz de mujer, muy dulce, muy tierna, que me decía:”
“- ¡Hijo mío, hijo mío! Es necesario santificarse. La santidad es un camino difícil, pero... el final es real y glorioso...”
Te pedimos, Oh Reina de todos los Santos que nos ayudes a buscar y a andar por el camino de la santidad que es agradable a Dios.
Rezar 3 Ave Marías, y después de cada una rezar: “Reina y Mensajera de la Paz, ruega la Paz al mundo entero.”
SEGUNDO DÍA
EL NOMBRE DE LA REINA Y MENSAJERA DE LA PAZ
Contemplemos a la Virgen Santísima revelando al joven Marcos que deseaba ser llamada en estas apariciones por “Reina y Mensajera de la Paz.” Le pedimos a Nuestra Madre Inmaculada que nos conceda siempre su bendición para que nosotros podamos propagar su devoción.
Rezar 3 Ave Marías, y después de cada una rezar: “Reina y Mensajera de la Paz, ruega la Paz al mundo entero.”
TERCER DÍA
EL ROSARIO DE LA EUCARISTÍA
Contemplemos a la Virgen Santísima revelándole al joven Marcos el Rosario de la Eucaristía y pidiéndole que fuera rezado todos los días, especialmente los jueves, en reparación al Santísimo Sacramento. Le pedimos a la Madre de la Eucaristía que nos conceda a nosotros la gracia de un gran amor a Jesús Eucarístico.
Rezar 3 Ave Marías, y después de cada una rezar: “Reina y Mensajera de la Paz, ruega la Paz al mundo entero.”
CUARTO DÍA
EL ROSARIO DE LA PAZ
Contemplemos a la Virgen Santísima enseñándole al joven Marcos el Rosario de la Paz, y pidiéndoles a sus hijos devotos que lo recen diariamente en el mundo entero, especialmente a las ocho de la noche. La Virgen les promete conceder la Paz al mundo y a todos los que lo recen piadosamente. Le pedimos a la Señora del Rosario de la Paz que nos conceda a nosotros el verdadero espíritu de oración y penitencia, y le conceda la Paz al mundo entero, lacerado por la discordia y por las guerras.
Rezar 3 Ave Marías, y después de cada una rezar: “Reina y Mensajera de la Paz, ruega la Paz al mundo entero.”
QUINTO DÍA
LAS APARICIONES DIARIAS DE MARÍA Y LAS VISIONES DEL CIELO, DEL INFIERNO Y DEL PURGATORIO
Contemplemos a la Virgen Santísima apareciéndole todos los días al joven Marcos por tantos años seguidos y mostrándole el Cielo, el Infierno y el Purgatorio para indicar la recompensa de los buenos, el castigo para los malos y la purificación de las almas. Le pedimos a la Reina del Cielo y de la Tierra que nos conceda a nosotros la gracia de creer en Su Presencia de Amor y la gracia de esforzarnos para llegar al Cielo junto a Dios, para que así escapemos del fuego del infierno.
Rezar 3 Ave Marías, y después de cada una rezar: “Reina y Mensajera de la Paz, ruega la Paz al mundo entero.”
SEXTO DÍA
LOS MENSAJES MATERNOS DE MARÍA Y SUS MILAGROS
Contemplemos a la Virgen Santísima apareciéndole todos los días al joven Marcos, dándole mensajes a la humanidad, pidiéndole oración, conversión, ayuno, vida sacramental, lectura de la palabra de Dios, confesión, paz y reconciliación, y realizando señales en el sol, en la luna, en las estrellas y muchas otras gracias para que sus hijos incrédulos se conviertan. Le pedimos a la Reina de los Ángeles y de los Santos que nos conceda a nosotros la Gracia de la vivencia de Sus Mensajes y la conversión de nuestro corazón hacia Dios.
Rezar 3 Ave Marías, y después de cada una rezar: “Reina y Mensajera de la Paz, ruega la Paz al mundo entero.”
SÉPTIMO DÍA
LA VIRGEN CON EL NIÑO Y SAN JOSÉ
Contemplemos a la Virgen Santísima con el Niño Jesús y San José, apareciendo en Jacareí y bendiciendo el mundo, las familias, la iglesia y los pueblos. Le pedimos a la Reina de las Familias que por medio de su santa Medalla de la Paz proteja todas las familias del mundo y nos conceda la grande gracia de tener familias santas, que sean generadoras de muchos santos.
Rezar 3 Ave Marías, y después de cada una rezar: “Reina y Mensajera de la Paz, ruega la Paz al mundo entero.”
OCTAVO DÍA
LA MEDALLA DE LA PAZ Y LA FUENTE MILAGROSA DE LA VIRGEN MARÍA
Contemplemos a la Virgen Santísima revelándole la Medalla de la Paz al joven Marcos en el día 8 de Noviembre de 1993, y posteriormente haciendo brotar una Fuente Milagrosa en Jacareí para personas de todo el mundo, a fin de aliviarlas y concederlas las gracias de su Amor Maternal. Le pedimos a la Virgen de la Medalla de la Paz que nos conceda a nosotros la gracia de la liberación de nuestros vicios y pecados, para que hagamos la voluntad de Dios.
Rezar 3 Ave Marías, y después de cada una rezar: “Reina y Mensajera de la Paz, ruega la Paz al mundo entero.”
NOVENO DÍA
LAS APARICIONES DE MARÍA - EL ÚLTIMO LLAMADO DE DIOS
Contemplemos a la Virgen Santísima, con sus ojos llenos de lágrimas de sangre, contándole al joven Marcos que los pecados del mundo aumentan cada día más, que la copa de la Justicia Divina está rebosando, que muchas almas van al infierno todos los días, que no hay quien les haga reparación, y que el plazo para la conversión del mundo está agotándose. Le pedimos a la Reina de los dolores que nos conceda a nosotros la gracia de la conversión de los pecadores, de la perseverancia de los justos y del alivio de las almas del Purgatorio.
Rezar 3 Ave Marías, y después de cada una rezar: “Reina y Mensajera de la Paz, ruega la Paz al mundo entero.”
ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS
“Oh María, Reina y Mensajera de la Paz, nosotros te suplicamos: trae la Paz al mundo entero. ¡Paz en la iglesia, Paz en las familias, Paz en los corazones, Paz en el mundo entero! Que todos nosotros seamos como Tú, mensajeros e instrumentos de la Paz.
Que el Espíritu Santo, el Santificador, venga con el don de la Paz, por la puerta de tu Corazón Inmaculado.
Que la Paz de tu Corazón Inmaculado, Oh María, destruya las fuerzas del infierno. Óh Jesús, Príncipe y Señor de la Paz, ten piedad de nosotros y del mundo entero. Amén.”
CIERTAMENTE REDOBLEMOS EL PASO ADELANTE SOMOS LOS GUERREROS DE ORACION Y HAU QUE JALAR MAS PUES URGENTE
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