Jacareí, 29 de Abril de 2018
Transmisión de las Apariciones Diarias en vivo vía internet en la WebTV mundial:
Transmisión de las Apariciones Diarias en vivo vía internet en la WebTV mundial:
(Vidente Marcos): “Sí. Sí, haré sí. Sí mi Señora. Sí, haré. Sí, haré
sí.”
MENSAJE DE MARÍA REINA Y MENSAJERA DE
LA PAZ
“Queridos
hijos, peregriné por todo el mundo llamando a Mis hijos a la conversión, pero
ellos no quisieron. Por causa de eso, las lágrimas bajan de Mis ojos sin parar.
Yo
lloro y clamo como una voz en el desierto sin haber nadie que Me escuche, sin
haber alguien que Me escuche. Mi Corazón Inmaculado es sólo dolor por las almas
que se van perdiendo todos los días.
Recen
más queridos hijos, para que verdaderamente más almas puedan salvarse.
Que
los apóstoles, los grandes apóstoles de Mi Corazón se levanten de todas partes
del mundo para ayudarme a salvar las almas del mundo entero, de todos Mis
hijos.
Es
preciso que vayan, que lleven Mis Mensajes a todos los lugares, que hagan los
grupos de oración y los cenáculos que Yo pedí por todas partes.
Deseo
que verdaderamente hayan cenáculos de oración por todos los lugares, pues, es
la única forma de salvar a la humanidad. Es preciso tornar conocidos Mis
Mensajes.
¿De qué sirvió Mis Mensajes de
Fátima, de Lourdes y de La Salette ser reconocidos y aprobados por la Iglesia? El
Mensaje no es difundido. Mis hijos decaen
cada vez más en la ignorancia de todo lo que Yo pedí. Es por eso que aquí
aparezco de manera nueva, extraordinaria y prolongada.
Apareceré
hasta cerca de Mi triunfo. Aquí no habrá
ese tiempo de esperar, aprobar. * Aquí hablaré, hablaré hasta el último
segundo que Yo pueda para poder salvar a Mis hijos.
*La
Madre de Dios se refirió aquí que no esperará a que la Iglesia apruebe Sus
Apariciones en Jacareí para comenzar su obra de salvación, ya que Ella afirmó varias
veces que éstas son las últimas Apariciones para la humanidad antes del Gran
Castigo Final.
Y
es por eso que ustedes deben dar a divulgar, deben dar a conocer Mis Mensajes
del pasado, porque los Mensajes no son conocidos, los Mensajes no son
obedecidos. Por causa de eso, las almas se pierden y Yo lloro.
Aquí
deseo verdaderamente formar a Mis apóstoles ardorosos, celosos, que irán por
todas partes llevando Mis Mensajes a todos Mis hijos.
Vayan
Mis hijos, lleven Mis Mensajes, para que verdaderamente por todos los lugares
puedan brotar las rosas místicas de perfección, de amor, de santidad que la
Santísima Trinidad desea.
Vivan la virtud de la obediencia. Virtud que salvó al mundo con Mi ‘Sí’ y con la
obediencia de Mi Hijo Jesús al Padre. Sí, con Nuestra obediencia, el mundo fue
salvo.
Cuando
ustedes obedecen Mis Mensajes, cuando obedecen la Voluntad de Dios, ustedes
también son salvos y muchas otras almas también son purificadas, convertidas y
salvas.
Vivan la virtud de la fe. Eva desconfió de la Palabra del Señor y por causa de
eso, creyó en el demonio y cayó en el pecado. Todas las veces que ustedes
también no tienen fe en aquello que Yo les digo de la parte del Señor,
fatalmente ustedes caen en el pecado y se tornan prisioneros de Satanás.
Imiten la virtud de Mi fe. Sí, Yo di Mi ‘Sí’ lleno de fe al Señor y a Su Voluntad.
Hagan como Yo, den un ‘Sí’ lleno de fe, lleno de confianza en las promesas del
Señor, en la Palabra del Señor. Y entonces Mis hijos, en ustedes también se
cumplirá el plan de salvación del Señor para ustedes mismos y para la salvación
de muchas almas.
Aquí
Mi Corazón Inmaculado realiza obras extraordinarias de amor. ¿No ven Mis
Mensajes en vídeos que Mi hijito Marcos hace? Son maravillosos. Ellos Me
conmueven y ellos tocan los corazones de Mis hijos. A través de ellos, incluso
el alma más alejada de Dios y de Mí, puede
sentir Mi Amor, puede comprender Mi Voluntad.
Divulguen
esos vídeos de Mis Mensajes para todos Mis hijos. Den Mis hijos 20 del disco
número 8 de Mis Mensajes para todos Mis hijos y más 10 del número 6 y 10 del
número 7. Es preciso que Mis hijos
conozcan Mis urgentes Mensajes, es preciso. Por eso, vayan, deprisa, antes que
el tiempo acabe.
Deseo
también que ustedes divulguen la Coronilla de la Misericordia que contiene Mis Mensajes de Heede, que Mi hijito
Marcos rezó con ustedes hoy. Para que así, más almas conozcan Mis Apariciones
en aquel lugar de Alemania y así abran sus corazones y correspondan al gran
amor que Yo tengo para con todos Mis hijos y se conviertan sin demora.
Cambien sus vidas. Conviértanse sin
demora. El Aviso está muy próximo.
Cuando
venga el Aviso Mis hijos, muchos realmente enloquecerán al ver el tamaño y la
gravedad de sus pecados. Muchos se arrojarán en los precipicios y hasta encima
de los edificios al ver con desesperación todo el horror de sus pecados.
No
sean del número de esos, conviértanse sin demora, para que en aquel día ustedes
estén con el alma purificada en la paz del Señor.
Continúen
rezando Mi Rosario todos los días, pues ello es el camino y medio seguro de
salvación.
El alma que rece Mi Rosario con amor,
aunque sea una única vez en la vida, Yo alcanzaré para esa alma la gracia de la
penitencia y del arrepentimiento antes de la muerte.
A
todos bendigo con amor: de FÁTIMA… de HEEDE… y de JACAREÍ.”
“Amado
hermano Carlos Tadeo, Yo, Judas Tadeo, siervo del Señor, vengo hoy para darte
el mensaje que debería haber dado ayer. Pero como Nuestro amadísimo Marcos
estaba desmayado, transferí Mi mensaje para hoy.
Estoy
aquí, te amo, te amo mucho. Estoy siempre a tu lado y nunca te dejaré. Siempre,
siempre estaré contigo.
Durante
toda Mi vida recé por ti, rezaba continuamente, pero, sobre todo, rezaba por ti
ardientemente, intensamente, todos los días a la noche cuando terminaba Mis
predicaciones.
Siempre
a las ocho de la noche Yo Me retiraba adonde quiera que Yo estuviese para rezar
por ti. Sí amado hermano, rezaba ardientemente por el gran apóstol del futuro,
de los últimos tiempos, que sería unido a un alma privilegiada del Señor y de
Nuestra Madre, de Nuestra Reina Santísima. Para con esa alma privilegiada
salvar almas y convertir a los pecadores, haciendo así a Nuestra Reina
Santísima triunfar en la tierra, triunfar en el mundo.
Rezaba
por ti ardientemente y es por eso que siempre a las ocho de la noche recibes
bendiciones especiales, no solamente de la Madre de Dios, pero también Mías.
Quédate
sabiendo que, cierta vez estaba Yo predicando en una ciudad y allí, aquellos
habitantes viendo que Mi predicación estaba realmente surtiendo efecto, que
muchos se convertían, armaron un plan para matarme.
Sí,
eran hechiceros que adoraban falsos dioses y viendo que Mi predicación
convertía a muchos y hacía con que muchos creyesen en el Señor Jesús, ellos
decidieron matarme para no tener su causa completamente arruinada.
Planearon
entonces una emboscada contra Mí. Me llamaron a una casa adonde decían que
había un viejo muriendo y que quería ser bautizado, para que así fuese salvo
antes de morir.
Y
cuando allá llegué, no había nadie, pero sí, trancaron la puerta y entonces Me
golpearon tanto que Me dieron por muerto. Después, Me arrastraron y por fin Me
arrojaron en un barranco donde rodé y ellos juzgándome muerto allí, Me dejaron.
Pero
una vez más el Señor Jesús Me curó, dándome fuerzas para levantarme de allí y
llegar hasta una casa adonde había almas que Yo había convertido. Allí pude descansar
y terminar de recuperarme durante algunos días de Mis heridas.
Ofrecí
todo aquello que padecí por ti, por vos, Mi gran hermano y amor de Mi Corazón.
Sí, verdaderamente todo lo que Yo padecía ofrecí por ti siempre.
Y
otra vez también envenenaron Mi comida. Pero el veneno, sin embargo, Me haya
hecho sufrir terriblemente, no pudo matarme, porque Mi Reina Santísima, Mi
Madre del Cielo, vino una vez más en Mi auxilio.
Permanecí
en cama, doliente por causa del veneno durante muchos días, ofreciendo todo por
ti. Y cuando restablecí completamente Mi salud, continúe en frente anunciando
la Buena Nueva de la Salvación a todos.
Sepas
querido hermano que, con esos sufrimientos ofrecidos por ti, muchas y muchas
gracias Yo obtuve con celo debajo de Mi Manto. Ningún mal podrá prevalecer
contra ti en tu vida ahora, ya que soy a tu favor, que Yo soy por ti.
Continúa
rezando Mi Coronilla siempre, porque a través de ella, Yo te daré muchas y
grandes gracias. Enseña esa Coronilla a todos, porque a través de ella, muchos
recibirán gracias y milagros como tú mismo ya lo comprobaste en tus cenáculos.
Yo aún quiero curar a muchos, quiero
liberar a muchos del poder del demonio. A muchos quiero enriquecer con los
bienes celestiales. Cuanto más rezaren Mi Coronilla, tanto más recibirán,
porque la medida de las gracias es la medida de la fe y de la oración fervorosa.
Yo
te bendigo con gran amor ahora.
Ama
siempre al hijo que Nuestra Reina Santísima te dio, porque, así como por Mi ‘Sí’
y por los méritos de Mi obediencia, de Mi servicio al Señor, Mis padres fueron
también enriquecidos de grandes gracias y fueron salvos. Así también por el ‘Sí’
del hijo, del hijo sobrenatural, del hijo segundo, el espíritu que el Cielo te
dio, que la Inmaculada te dio, serás siempre más repleto de las gracias y de
los bienes celestiales del Señor.
Yo,
Judas Tadeo, te bendigo.
Reza
el Rosario siempre, ello es el arma
invencible de todas tus victorias.
Yo
te bendigo con amor ahora: de JERUSALÉN… de NAZARET… y de JACAREÍ.”
Después de tocar y bendecir los
sacramentales:
(María Santísima): “Conforme ya dije: ‘Adonde quiera que unos de estos
cuadros lleguen, allí Yo estaré con Mi Hijo Jesús, llevando las grandes gracias
y derramándolas sobre todos Mis hijos.’
Nuevamente
bendigo a todos y especialmente a ti, Mi hijito Carlos Tadeo, Mi apóstol y
también alegría de Mi Corazón.
Gracias
por los cenáculos que has hecho, incluso en lugares tan distantes de tu casa,
llevando siempre más Mi Palabra. Esos cenáculos han quitado tantas espinas de
Mi Corazón, han alejado tantos castigos y también han arrebatado tantas almas
de las garras de Satanás.
Gracias
hijo Mío. Continúa, porque esos cenáculos salvarán a muchas almas, llevarán a
muchas almas al Cielo, y aumentarán muchísimo tu corona de gloria también en el
Paraíso.
Y
también te bendigo Marcos. Gracias por haber ofrecido lo que sufriste ayer a la
noche por tu padre Carlos Tadeo. Cuanto más ofreces por él, más nuevas gracias
mereces, alcanzas para él. Y gracias también por haber ofrecido por Mis planes
maternos. Sé que siempre puedo confiar en ti y siempre puedo pedir sacrificios
y sufrimientos a ti, que siempre Me ofreces con amor.
Yo
te agradezco y a todos nuevamente bendigo y dejo Mi paz.”