Revelaciones sobre esta SANTA HORA en Jacareí
por medio de la Santísima Virgen REINA Y MENSAJERA DE LA PAZ
¿Cómo fue la revelación?
El 26 de junio de 1993, Nuestra Señora
enseñó el Rosario de la Eucaristía a Marcos Tadeu, en presencia de una persona
que rezaba con él, y pidió que fuese divulgado por toda parte. El vidente narra
cómo se dio esta Aparición:
“Nosotros
estábamos en la pieza rezando, mi tía y yo. Era un sábado de mañana, día 26 de
junio de 1993. Súbitamente Nuestra Señora apareció y me dijo:
“Hoy,
les enseñaré el Rosario de la Eucaristía, que ustedes deben rezar todos los
días en desagravio a Jesús en el Santísimo Sacramento.”
Enseguida,
Nuestra Señora agarró el lindo Rosario de cuentas brillantes que traía en las
Manos y comenzó a dictar las oraciones y los misterios para que sean rezados
con ello.
Luego
después de haber enseñado todas las oraciones, Nuestra Señora, mirándome de
nuevo, dijo:
“¡Recen
todos los días este Rosario que les di. Con ello, ustedes conseguirán
desagraviar el Santísimo Corazón de Jesús, que está terriblemente ofendido por
los pecados y sacrilegios que recibe de los hombres. Yo Me uniré en oración con
ustedes. Sean perseverantes en está oración y consuelen el Corazón de Jesús!...”
Mientras
Nuestra Señora enseñaba el Rosario de la Eucaristía, apareció una gran Hostia
Luminosa, que sangraba abundantemente. Aquella Sangre era recogido en un Cáliz,
que tendía luego debajo de la Hostia. Al final del Rosario, la Hostia paró de
sangrar y se tornó extremadamente resplandeciente de Luz. Nuestra Señora dijo:
“Si
ustedes rezaren así todos los días, Mi Divino Hijo Jesucristo Se alegrará, por
verse Amado, Glorificado y deseado por sus corazones. Yo estaré particularmente
unida con aquellos que rezaren este Rosario con Fe viva y humildad…
¡Yo
Soy la Madre de la Eucaristía y deseo llevarlos a todos a Jesús en el Santísimo
Sacramento!...”
Aparecieron algunos Ángeles alrededor de
Nuestra Señora, y se arrodillaron con Ella, rezando la oración:
“¡Mi
Dios, yo creo, adoro, espero y te amo. Te pido perdón por todos aquellos que no
creen, no adoran, no esperan y no te aman!…”
La
Santísima Virgen y los Ángeles cantaron un himno bellísimo de adoración a
Jesús, que yo no conseguí entender, era otro idioma. Enseguida, todo
desapareció.
Cuando
volví en mí, estaba de nuevo en mi pieza y relaté enseguida todo lo que vi y
escuché a mi tía. De noche, conté al grupo de oración la Aparición de la mañana
y, luego después, comenzamos a divulgar el Rosario de la Eucaristía por la
ciudad y para los peregrinos.”
No demoró mucho y las noticias de las
Gracias alcanzadas con este Rosario comenzaron a llegar. La mayor de ellas: un
ardiente Amor por Jesús en la Eucaristía encendiéndose en los corazones, y
muchas conversiones de regreso a DIOS y a la Iglesia. Es así, como Jesús recompensaba a los que Le hacían desagravio y
reparación y cercaban Su Sagrado Corazón de Amor, de Cariño y Adoración.
Día 26/06/93 – Mensaje de la Santísima
Virgen María
“¡Recen… Recen mucho! ¡Recen el
Santo Rosario!... Recen también el ROSARIO DE LA EUCARISTÍA, que les acabé de
enseñar…
Recen el ROSARIO DE LA
EUCARISTÍA todos los días y cuando fueran delante de Mi Hijo, en el Santísimo
Sacramento… Jesús desea ser adorado, amado, exaltado por medio del Rosario de
la Eucaristía… Yo propia Me uniré a ustedes en adoración…”
Día 22/07/93 – Mensaje de la Santísima
Virgen María
...No hagan
sacrilegios con Mi Hijo en la Eucaristía… ¡Recen el Rosario de la Eucaristía,
que aquí enseñé, todos los días!... Ustedes consolarán a Jesús y lo
Glorificarán… y destruirán las trampas de Satán…
Día 18/01/94 – Mensaje
de la Santísima Virgen María
LA EUCARISTÍA Y LA
INVITACIÓN A
LA REPARACIÓN
“Queridos hijos, hoy, Yo vengo a hablarles de Jesús Eucarístico, y de la
necesidad de reparación… Queridos hijos, la reparación es urgente ahora, para
que DIOS tenga compasión de ustedes.
Mis hijos, YO SOY LA MADRE DE LA EUCARISTÍA… Yo les
enseñé aquí el ROSARIO DE LA EUCARISTÍA, para mostrarles que estas Mis
Apariciones aquí son, principalmente, Eucarísticas.
De ahora en adelante, todo aquel que todos los
jueves, a las siete horas de la noche, rezare el Rosario de la Eucaristía,
recibirá muchas Gracias, Misericordia, y sobre todo, una muerte feliz, como
recompensa por su cariño a Jesús en la Eucaristía.
Mis hijos, cuando escucharen el reloj sonar a las
siete horas de la noche, arrodíllense, pues, este Rosario debe ser rezado todo
de rodillas, en señal de penitencia. En este momento, las puertas de la
Misericordia del Corazón de Mi Hijo Jesucristo estarán abiertas para derramar
Misericordia en todos Mis hijos que estuvieren orando en ese momento.
Si ya estuvieren en la Santa Misa, recogeré la
reparación de la misma forma. Pedí los jueves, pues fue el día en que Jesús
celebró la Última Cena, e instituyó el Santísimo Sacramento del Altar, que es
‘Él’ mismo junto de ustedes.
¡El Santísimo Sacramento es Mi Hijo en medio de
ustedes!
Todos los días, Mi Hijo baja de los Cielos para
ustedes. DIOS baja a las Mesas Eucarísticas, para ser ‘alimento’ de millares de
corazones. Todos los días, Jesús está dándose inmensamente para ustedes, en el
Santísimo Sacramento.
Hoy la Corona de Espinas que cercaba el Corazón de
Jesús, también está en Mi Corazón Materno e Inmaculado. Cuantos sacrilegios,
cuantas comuniones sacrílegas, cuantas profanaciones, cuanta dejadez,
indiferencia y abandono a Jesús en el Sagrario. (Aquí Ella interrumpe y llora)
¡Ah!, si vieran con Mis Ojos cuanto es basta la
multitud de almas que corren el riesgo de condenarse. Y cuantas se condenan por
pecados cometidos contra Jesús, en el Santísimo Sacramento.
Jesús, busca ahora, almas que lo consuelen, y que
dolor tengo, al decir que muchas veces, Jesús no las encuentra…(pausa). Jesús no quiere quedar
‘solito’ en el Sagrario. Jesús deber ser adorado, AMADO, exaltado por todo y
todos… (pausa) Estas almas, (las que lo
consuelan) llenas de AMOR para con DIOS, son queridas por Él, y jamás salen
de Su Paterno Corazón, y del Corazón Inefable de Su Madre Celeste.
Deben, hijos, confesarse, como pedí, todos los
meses, para que no caigan en tentación de sacrilegio y para que Jesús encuentre
‘casa digna’ para entrar. Varias veces, Jesús entra en verdaderos ‘pantanos’…
inmundos y puercos, donde está toda suciedad de Satanás y de su perversión.
Satán quiere hoy vengarse de Jesús, ‘escupiendo’ y
‘vomitándole’ en el ROSTRO, por medio de
las comuniones y profanaciones sacrílegas, que hoy en día, se arrastran como el
cáncer fatal de las almas… y Mi Mayor Dolor, es que él, infelizmente, consiguió
en gran parte, su deseo…(comenzó a llorar
más)
Pero, en breve, Yo pondré fin a su osadía, y lo
expulsaré del Templo Santo del Señor, y lo encadenaré en el infierno. ¡NUESTRA
VICTORIA es segura!
En el lugar de estos ‘tronos impíos’ ”
ROSARIO DE LA EUCARISTÍA
Misterios
1º- Nuestro Señor alimenta a una multitud de 5 mil personas.
2º-Nuestro Señor promete la Eucaristía diciendo: " Yo soy el pan bajado del cielo".
3º-Nuestro Señor sacia a una multitud de 4 mil personas.
4º-Nuestro Señor instituye la Santísima Eucaristía en la Última Cena.
5º-Misterio de la Esperanza: Contemplamos la promesa del Triunfo del Reino Eucarístico de Jesús unido al Triunfo del Inmaculado Corazón de María.
En las tres primeras cuentas:
Mi Dios, yo creo, adoro, espero y te amo. Te pido perdón por todos aquellos que no creen, no adoran, no esperan y no te aman.
En las cuentas grandes:
Santísima Trinidad, Padre, Hijo y Espíritu Santo, yo les adoro profundamente. Les ofrezco el preciosísimo Cuerpo, Sangre, Alma y Divinidad de Nuestro Señor Jesucristo, presente en todos los Sagrarios de la tierra, en reparación por los ultrajes, blasfemias, sacrilegios e indiferencias con que Él mismo es ofendido. Les pido por los méritos infinitos de Su Santísimo Corazón y por la intercesión del Inmaculado Corazón de María, la conversión de todos los pobres pecadores. Mi Dios, yo creo, adoro, espero y te amo. Te pido perdón por todos aquellos que no creen, no adoran, no esperan y no te aman.
En las cuentas pequeñas:
Gracias y Alabanzas sean dadas por medio de María en todo momento, al Santísimo y Divinísimo Sacramento.
Al final de cada misterio:
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, como era en el principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos, Amén. Oh María, Madre de la Eucaristía, haz que yo ame a tu Hijo Jesús, presente en el Sagrario, sin cesar, noche y día. Bendito y Alabado sea por siempre el Santísimo Sacramento.
En las tres últimas cuentas:
Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal, ten piedad de nosotros y del mundo entero.
Oración final:
Oh Jesús, sabemos que estás realmente presente en el Santísimo Sacramento del Altar. Nosotros deseamos consolarte por los sacrilegios y pecados con que eres ofendido en este Sacramento Admirable. Nos unimos a los coros de los Ángeles para adorarte. Nos unimos a los coros de los Santos para adorarte. Nos unimos con toda la Iglesia para adorarte. Te ofrecemos esta oración en reparación por los pecados, sacrilegios y blasfemias con que eres ofendido. Alabado seas por siempre. Amén.
Gracias.
ResponderBorrarGracias.
ResponderBorrarQue maravilloso rosario sentí la presencia viva de Jesús después de rezarlo
ResponderBorrarQue hermoso Rosario
ResponderBorrarQue hermoso Rosario
ResponderBorrarQue hermoso Rosario
ResponderBorrarGracias Madre por tanto Amor
ResponderBorrarMe bebi las lagrimas rezando el Rosario al sentir lo mal que tratamos Al que nos ama tanto e incondicionalmente. 😔😔😪
ResponderBorrarhttps://chat.whatsapp.com/CxdljFBYh7AF8OBA7TE70U
ResponderBorrarhttps://chat.whatsapp.com/KZqy1rwgqV5Lie9U8QtevK
ResponderBorrarCon motivo del proximo cierre del año jubilar en honor a San Jose 8 de diciembre