Jacareí, 26 de Julio del 2014
Transmisión de las Apariciones Diarias en vivo vía internet en la WebTV
mundial: www.apparitionstv.com
MENSAJE DE SANTA LUCÍA DE SIRACUSA
“Amados Hermanos Míos,
Yo, Lucía, vengo del Cielo una vez más hoy para decirles: ¡Paz, Paz, Paz a su corazón!
Vivan en la Paz,
difundan la Paz y recen cada vez más por la Paz. Solamente con el Rosario
ustedes pueden alcanzar la Paz para el mundo y para las familias. Récenlo,
recen también el Rosario de las Lágrimas de la Madre de Dios, para que así,
toda obra de Satanás sea destruida y revertida en Gloria y Triunfo del Señor.
El mundo continúa yendo
por el camino del pecado. No escuchan los avisos de la Madre de Dios. No
prestan atención en los Mensajes que Ella ha dado. Desprecian y se burlan de
Sus Lágrimas, Manifestaciones y Mensajes.
Un día se arrepentirán
de esto, pero ya será tarde. Y el mundo tendrá que pagar su pecado, lavando en
su propia sangre. Muchos de los que hoy desprecian los Mensajes de la Madre de
Dios, tendrán que lavar sus pecados en su propia sangre. Tendrán que pagar en
la propia carne por haber despreciado tantas y tantas Gracias que la Madre de
Dios les ofreció en Sus Apariciones y ellos, por amor al pecado, no quisieron,
rechazaron.
Yo, Lucía, estoy con ustedes y les pido:
Conviértanse. Cambien de vida y no sigan más ofendiendo al Señor y a Su Madre
con la vida de pecado. Vuelvan para Dios, vivan en Su Gracia y Dios derramará
en sus vidas, tantas bendiciones y tantas Gracias que ustedes nunca más serán
los mismos. Ya experimentarán un poco de aquella vida maravillosa que los
Bienaventurados viven en el Cielo junto con Nuestro Señor.
Recen el Rosario de las
Lágrimas con más amor. Recen Mi Coronilla con más amor al menos una vez por
semana y Yo prometo que aquellos que así hicieren, y fueren Mis Verdaderos
Devotos, Yo les concederé todo cuanto Me pidieren.
Vengan aquí en este
lugar escogido por el Cielo, para aprender el Verdadero Amor a Dios y a la
Madre de Dios. Aquí, las Gracias serán abundantes para aquellos que tuvieren Fe
y verdadero deseo de obedecer a los Mensajes de la Madre del Señor.
A todos en este momento
bendigo con amor: de CATANIA… de SIRACUSA… y de JACAREÍ.”
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