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Coronilla de Santa Águeda de Catania

CORONILLA DE SANTA ÁGUEDA DE CATANIA 

"Águeda tuvo como martirio la amputación de los senos."

En el inicio:

Señal de la Cruz +

En las tres primeras cuentas:

“Sagrados Corazones de Jesús, María y José, miren los méritos de Santa Águeda de Catania, que derramó su sangre por amor a ustedes en la tierra y que les ama más ardientemente en el Cielo.”´

Oración Inicial:

“Oh Corazones Unidos de Jesús, María y José, postrados a sus pies, nosotros les ofrecemos los méritos del martirio de Santa Águeda de Catania, que derramó su sangre por amor a ustedes, defendiendo con heroico coraje y amor inflamado, el Nombre de ustedes y la Santa Fe Católica. Por tan ardiente amor que ella tuvo cuando derramó su sangre por ustedes, nosotros les pedimos, oh Corazones Unidos, atiendan nuestras súplicas y hagan con que apreciemos correctamente las lecciones que nos dan la vida de Su Sierva, Santa Águeda de Catania, a fin de que cumplamos la Santísima Voluntad de ustedes aquí en la tierra, para que seamos dignos de alabarles juntamente con ella en la Gloria del Cielo para siempre. Amén.”

En la cuenta grande:

“Sagrados Corazones de Jesús, María y José, miren los méritos de Santa Águeda de Catania, que derramó su sangre por amor a ustedes en la tierra y que les ama más ardientemente en el Cielo.”

En las cuentas del denario:

“Corazones de Jesús, María y José, atiendan nuestras súplicas, por los méritos del martirio de Santa Águeda de Catania.”

Al final de cada denario:

Santa Águeda de Catania, ruega a Dios por nosotros y danos la paz.”

En las tres últimas cuentas:

“Sagrados Corazones de Jesús, María y José, miren los méritos de Santa Águeda de Catania, que derramó su sangre por amor a ustedes en la tierra y que les ama más ardientemente en el Cielo.”

Oración Final:

“Oh Santa Águeda, Mártir del Amor, nosotros te suplicamos, que presentes los méritos de tu vida y de tu martirio, unidos a nuestras súplicas, a los Corazones de Jesús, María y José, a quienes nos dirigimos en nombre de tus méritos, a fin de que Ellos atiendan nuestras súplicas y se dignen a concedernos las Gracias que pedimos por medio de ti juntamente con la corona de la vida eterna.
Que tu sangre derramada por amor a los Sagrados Corazones, oh Santa Águeda de Catania, destruya las fuerzas infernales del maligno en el mundo y líbranos de todos los males.
Por los méritos de Santa Águeda de Catania, oh Corazones de Jesús, María y José, salven al mundo de la pérdida amenazadora. Amén.”


Primer Misterio: “Contemplamos a Santa Águeda recibiendo el Bautismo, aprendiendo con amor los misterios de la Santa Fe Católica y viviendo una vida de intensa de oración, y aprendemos de ella: a meditar la Palabra de Dios, los Mensajes de los Sagrados Corazones y la vida de los Santos, para ser como ella: Verdaderos Católicos, Grandes Santos, para la mayor Gloria de Dios.”

Segundo Misterio: “Contemplamos a Santa Águeda haciendo voto de consagrarse totalmente a Jesús y a Su Madre Santísima, para ser solamente de Ellos para siempre y aprendemos de ella: a amar a Dios y a Su Madre Inmaculada de todo nuestro corazón y servirlo con amor por toda nuestra vida.”

Tercer Misterio: “Contemplamos a Santa Águeda viviendo continuamente en la oración, en la divina caridad, renunciando a las cosas vanas del mundo y siendo presa por ser Católica, por el malvado Gobernador Quintiano, delante del cual defendió valientemente el Nombre de Jesús, de María Santísima y de la Santa Fe Católica. Resistió bravamente a las promesas de riqueza y amor de la vida hechas por Quintiano y aprendemos de ella: el amor a la oración, la renuncia a todas las tentaciones mundanas que quieren separarnos de Dios y a defender siempre por palabras y obras, la Santa Fe Católica y los Santos Mensajes de los Sagrados Corazones en Sus Apariciones en Jacareí."

Cuarto Misterio: “Contemplamos a Santa Águeda martirizada en la “fornace” por orden del malvado Quintiano, primeramente siendo presa en el potro que descoyuntó todos sus miembros, después teniendo sus senos cruelmente cortados y arrancados con cuchillos y tenazas de hierro, siendo arrojada después en el calabozo para morir de dolor, fiebre y sed, guardando heroicamente la Fe y el Amor a Jesús, y aprendemos de ella: el Verdadero Amor a Dios, la virtud de la constancia, de la paciencia y la fidelidad a Dios y a Nuestra Señora en los sufrimientos de nuestra vida.”

Quinto Misterio: “Contemplamos a Santa Águeda muriendo después de ser arrastrada por fragmentos de vidrios y brasas ardientes, siendo quemada viva, derramando su sangre virginal por amor a Dios, a la Virgen Inmaculada y a la Santa Fe Católica, y aprendemos de ella: el amor a las virtudes cristianas, el Verdadero Amor al Señor que se prueba con obras y preferir morir antes que traicionar y ofender a Dios y a Nuestra Señora.”

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